Nuestra dieta y estilo de vida puede afectar a nuestra salud mental, cuidar la alimentación nos puede ayudar a ser más felices, te explico cómo

Estando un día hace muchos años en el aeropuerto de Madrid esperando para coger el vuelo de regreso a casa después de un largo viaje, me encontré con mi catedrático de endocrino, Predidente de la Asociacion de Endocrinología Española y una eminencia a nivel mundial.

Charlando con él alrededor de un café, me comentó si yo preguntaba a mis pacientes con depresión por su alimentación. La verdad que salvo casos concretos no lo solía hacer. Me contó, que era muy importante que lo hiciera, ya que en muchas ocasiones era la alimentación lo que provocaba casos de distimia, melancolía y hasta depresión. Esto se debía fundamentalmente a la eliminación total de los hidratos de carbono de la dieta. Por supuesto que hay hidratos de carbono que tenemos que evitar, todos los refinados y ultraprocesados, pero hay muchos otros que tendrían que estar a diario en nuestra alimentación, como son los hidratos de carbono de absorción lenta y los que se encuentran en las frutas y las verduras. 

¿Cómo influye la dieta en nuestra salud mental?

Ocurre que todas nuestras células se alimentan de glucosa. Pero además no sé si sabías que más del cincuenta por ciento de la glucosa de nuestro organismo es consumida por nuestras neuronas, ¡imagínate!. Cuando ingerimos hidratos de carbono, estos pasan rápidamente a convertirse en glucosa y todas nuestras células se ponen muy contentas y felices, ya lo habrás notado, y sobre todo nuestras neuronas. Es lo de “barriguita llena corazón contento”. 

Cuando no hay glucosa que llevarse a la boca, nuestro organismo tira de los almacenes de glucosa, que está guardada en forma de glucógeno, y cuando estos se terminan, comienza a realizar complicados procesos para transformar las proteínas y las grasas en glucosa, que es lo que nuestro cuerpo necesita. 

Estos procesos de transformación nos suponen tal esfuerzo y gasto de energía que nuestras neuronas acaban deprimiéndose, sí, así como te lo digo, se acaban entristeciendo, nuestro organismo se agota con tanto esfuerzo, y podemos entrar en distimia, melancolía e incluso depresión. 

Actitudes alimentarias que pueden hacernos caer en depresión o empeorar si ya la tenemos

Hoy en día hay muchas personas que se alimentan únicamente de proteínas, o de proteínas y grasas, otros hacen ayuno, tenemos una gran variedad de dietas diferentes sin ningún tipo de control médico. Porque este es el tema, una dieta se pone de moda y todo el mundo quiere hacerla, sin saber si pueden o no, o cómo puede afectar a su salud, tanto física como mental. Y después te encuentras en consulta casos de pacientes que no pueden con su vida, entristecidos y melancólicos, y cuando les preguntas por su alimentación, observas todo tipo de disparates. En muchos casos únicamente regulando la alimentación de estas personas remontan notablemente, no sin antes haber hecho un cambio de pensamientos, porque si no es así volverán a lo mismo, hasta estos niveles nos han lavado el cerebro. 

Los que me conocen saben que soy una defensora de la alimentación mediterránea, numerosos estudios han demostrado que el simple hecho de llevar una dieta mediterránea saludable mejora significativamente los síntomas de la depresión, la tristeza y la melancolía. ¡Qué razón tenia mi catedrático de endocrino!

¿Qué alimentos pueden mejorar nuestra depresión?

Verduras, legumbres, aceite de oliva extra virgen, frutas, cereales integrales, pescado azul, carnes blancas o frutos secos entre otros. Forman parte de una dieta mediterránea. Todos estos alimentos son los preferidos de nuestra microbiota intestinal, esos millones de microbios maravillosos que pueblan nuestro intestino y que son responsables de fabricar la mayor parte de la serotonina que se produce en nuestro organismo. Y la serotonina es la gran responsable de nuestro estado de ánimo. ¿A qué ya lo has relacionado todo?

Si alimentas a tu microbiota intestinal con sus alimentos favoritos, y desde luego estos están en nuestra amada dieta mediterránea, ellos te lo agradecerán estando muy contentos, y fabricando mucha serotonina para que tú también lo estés. 

La comida ultraprocesada, las harinas refinadas, el azúcar y los dulces, las carnes rojas o los embutidos son alimentos que nos entristecen, en un primer momento nos puede parecer que no es así, pero podrás observar con el tiempo que es un tipo de alimentación que te quita la energía y te entristece, a nuestra microbiota no le sienta bien este tipo de alimentación, se pone triste y en consecuencia nosotros también, ya que fabrican menos serotonina.

Dietas restrictivas, un peligro para nuestro peso y para nuestra mente

Por otro lado también tenemos que considerar lo nos entristecen las dietas restrictivas, las que no nos dejan comer nada de lo que nos gusta, aquellas en las que pasamos hambre, el efecto rebote después de haber estado haciendo un gran esfuerzo para perder los kilos que nos pueden sobrar o los atracones después de la restricción. Todo ello provoca pensamientos de frustración, de tristeza, de fracaso, de irritabilidad, de ira, de infelicidad que nos pueden llevar a situaciones de tristeza, melancolía y hasta depresión, porque como ya sabes primero son los pensamientos y después los sentimientos. Y según pienses te vas a sentir. 

Elige una alimentación mediterránea, saludable y completa que te siente bien, con la que obtengas energía y placer, todo ello puede hacer que mejoren los síntomas de la depresión. Si bien la depresión siempre tiene que ser tratada por un profesional de la medicina y requiere tratamiento farmacológico. 

Ya disponible mi nuevo libro, “La alimentación emocional“, en él, podrás encontrar consejos y técnicas psicológicas que te ayudarán a comer de forma sana sin esfuerzo, sintiéndonos bien, sanos y animados.

Si sigues las pautas y trucos de mi nuevo libro comerás de forma sana y conseguirás sentirte bien por ello, porque si nos cuidamos, y nos sentimos bien, seremos mucho más felices.

Mientras puedes leer cualquiera de mis otros tres libros, “La Medicina Emocional. Cómo mejorar tu salud cuidando de tus emociones”, “El efecto tarta. Práctica el egoísmo positivo para ser más feliz” y “Las Ruedas Dentadas. Pequeños cambios para grandes cambios”. En ellos encontrarás herramientas para encontrarte mejor en todos los aspectos de tu vida. 

Dra. Marisa Navarro.