El estrés térmico lo referimos fundamentalmente al que se produce por sobrecarga de calor en el cuerpo, aunque también se podría hablar de un estrés térmico producido por un exceso de frío, aunque este suele ser más fácil de subsanar. 

El estrés térmico por calor es el exceso de calor que sufren las personas en su cuerpo como consecuencia de las altas temperaturas y el no poner medios para que estas temperaturas sean más bajas. 

Estrés térmico laboral

En la mayor parte de los casos se refiere este estrés a los trabajadores, aunque puede sufrirlo cualquier persona, en el caso de los trabajadores se relaciona con las temperaturas que se dan en el lugar en el que trabajan, con la intensidad del trabajo que se realiza y con la indumentaria que llevan puesta en ese momento. 

Todo ello puede hacer que se acumule más calor en el cuerpo del que puede ser fisiológico, subiendo la temperatura central de estas personas por encima de los 38 grados, lo que provoca alteraciones de todo tipo en el cuerpo, algunas de ellas pueden ser muy graves. 

Cuando la temperatura de nuestro cuerpo aumenta por los factores externos que sea, nuestro cuerpo intenta deshacerse de ese calor por medio de diferentes mecanismos fisiológicos con los que cuenta, se produce una vasodilatación periférica, por eso nos ponemos tan colorados, y comenzamos a sudar profusamente.

El estrés térmico es algo que hay que tenerse muy en cuenta ya que en ocasiones llega a desencadenar incluso la muerte del individuo. 

En algunos casos  el estrés térmico se produce de manera muy rápida y con daños muy graves, pudiendo llegar a producirse un golpe de calor que provoque la muerte, aunque lo más frecuente es que las personas vayan notando sus síntomas poco a poco. Primero se empieza teniendo mucho calor, esto resulta muy incómodo para desarrollar un trabajo, este intenso calor produce determinadas pérdidas de facultades, eso que decimos que estamos atontados por el calor, esto además de hacer que no se ejecuten correctamente los trabajos, aumentará el riesgo de accidentes.

Debemos también estar atentos a las posibles enfermedades que pueda  tener la persona, pues si padece enfermedades crónicas de tipo respiratorio, de corazón, renales, etc.. estás agravarán sus síntomas a consecuencia del estrés térmico. 

Disminución de nuestras facultades por el calor

Como comentábamos, lo primero que sienten las personas con estrés térmico es la incomodidad por exceso de calor, comienzan así a sudar, y a ponerse colorados por la vasodilatación, pero además se ponen de muy mal humor, porque el estrés térmico nos pone muy irritables, con lo cual la convivencia con otras personas se hace mucho más complicada. Se produce también apatía, pérdida de concentración y de memoria, somnolencia, disminución de los reflejos. 

Con todos estos síntomas que se desarrollan en las personas sometidas a estrés térmico, se hace casi imposible que se realice un trabajo adecuado, además de los perjuicios que pueden producirse para la salud. 

Entre las enfermedades que se consideran provocadas por el estrés térmico tenemos, erupciones cutáneas, rozaduras, calambres por la pérdida de electrolitos por una sudoración excesiva, síncopes y pérdida de conocimiento por exceso de calor, deshidratación también por la sudoración excesiva, sequedad de mucosas, agotamiento y fatiga, taquicardia, se orina poco y la orina tiene un color muy oscuro ya que esta muy concentrada, náuseas, mareos, dolores de cabeza, todo ello puede llevar a la persona a sufrir un golpe de calor en el que se produce la muerte. 

Golpe de calor por estrés térmico

Aunque el golpe de calor puede llegar después de los síntomas antes comentados de estrés térmico, también puede ocurrir de manera brusca ante el sometimiento a altas temperaturas sin que la persona note síntomas previos. Lo que se produce es un colapso de los sistemas de regulación de la temperatura corporal, la temperatura central de la persona sube por encima de los 38 grados centígrados, y el organismo no consigue bajarla, produciéndose daños muchas veces irreversibles en todos los sistemas del organismo, renal, cardiovascular, nervioso, etc. La muerte es irremediable en la mayor parte de los casos de golpe de calor. 

La posibilidad de sufrir un golpe de calor aumentan en las personas obesas, con enfermedades cardiovasculares y respiratorias crónicas, así como con la toma de alcohol y algunos fármacos. Para que os hagáis una idea de la desregulación de la temperatura que se sufre en un golpe de calor, la temperatura rectal de estas personas puede llegar a ser de 45 grados. 

Cuando las personas tienen que trabajar sometidas a estrés térmico, para evitar los golpes de calor y otros posibles daños en la salud, tendría que haber una aclimatación a las altas temperaturas, esto se consigue exponiéndose poco a poco a ellas para que nuestro sistema termorregulador vaya acostumbrándose y no se colapse. 

Hay trabajos especialmente sometidos a estrés térmico, trabajo en cocinas, fundiciones, al aire libre a pleno sol como los trabajadores de la construcción etc..

¿Cómo evitar el estrés térmico?

Tendremos que implementar los cambios necesarios para evitar el estrés térmico, cambio de horarios de trabajo, tiempo de descanso en lugar fresco, beber el suficiente líquido y reponer electrolitos, evitar exponerse al sol en las horas de mayor calor, usar los mecanismos necesarios para disminuir la temperatura en interiores abriendo ventanas y creando corrientes y con ventiladores y aire acondicionado, usar ropa de trabajo suelta y fresca adecuada a las altas temperaturas que se estén produciendo, etc.  tendremos que utilizar cualquier medida que disminuya el estrés terminó y las alteraciones que esté puede provocar. 

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Dra. Marisa Navarro.