¿Ozempic si? ¿Ozempic no? Todo lo que debes saber sobre este fármaco tan de moda y que puede traer tantos peligros para aquellos que lo toman sin control

El Ozempic es un fármaco que se utiliza en el tratamiento de la diabetes tipo 2 está siendo utilizado indiscriminadamente para la pérdida rapida de peso.

Si su uso no tuviera efectos secundarios, algunos muy graves, estaríamos ante la panacea para adelgazar sin hacer esfuerzo alguno, pero claro esto no es así.

Ocurrió a partir de la rápida pérdida de peso de unos famosos, todos se preguntaron qué habían hecho para conseguir ese adelgazamiento de forma tan fulminante, rápidamente se pusieron a investigar y no tardaron en descubrir que todo se debía a la utilización de un fármaco llamado Ozempic.

La noticia corrió como la pólvora y todo el mundo quería conseguir ese fármaco supuestamente milagroso que hacía que perdieras peso sin ningún esfuerzo.

Un fármaco que había sido diseñado para aquellos pacientes con Diabetes tipo 2 que no respondían a otros tratamientos, estaba popularizándose como la solución al sobrepeso y a la obesidad.

Es necesario que sea recetado por un médico para poder adquirir en la farmacia

El Ozempic en España necesita receta para ser dispensado en las farmacias. Y si bien en nuestros Sistema de Salud solo será prescrito para aquellos pacientes que realmente lo necesitan, diabéticos tipo 2 y obesidad , y siempre con autorización de la inspección médica. No ocurre lo mismo en la calle, donde muchos centros privados de adelgazamiento y profesionales sin demasiados escrúpulos lo están recetando para la pérdida fácil de peso, incluso en personas que únicamente tienen unos kilos de más y que desean estar muy delgadas.

Hoy en dia, donde no se potencia la cultura del esfuerzo en ningún sentido, tampoco lo hace en cuanto a mantener un peso saludable. Se quiere todo al momento y sin ningún esfuerzo, y esas son las premisas del Ozempic.

La presión sobre los requerimientos de perder peso hacen que muchas veces se utilicen  prácticas que en mi opinión no deberían ser utilizadas.

El Ozempic puede tener graves efectos secundarios.

Los trastornos gastrointestinales suelen ser las reacciones adversas más frecuentes, nauseas, vomitos, diarrea, estreñimiento, dolor abdominal, reflujo gastroesofagico o gases excesivos, son algunos de ellos. Estos suelen ser síntomas todos ellos bastante leves. Pero no se queda aquí la cosa, como podéis suponer.

Lo cierto es que la utilización de Ozempic en ratones ha provocado el desarrollo de tumores en la gandula tiroidea, incluso de Carcinomas Medulares. Por ello se desaconseja su utilización en aquellas personas con antecedentes personales o familiares de este tipo de tumores.

Las pancreatitis y los cálculos biliares son también más frecuentes tomando este fármaco.

Además nos encontramos con unos resultados que se mantendrán en el tiempo siempre y cuando mantengamos la toma del fármaco de forma crónica, ya que si no hay un cambio de vida hacia unos hábitos saludables el efecto rebote al dejar de inyectarse el Ozempic es tan rápido como lo ha sido la pérdida de peso, o más.

Además se está produciendo en el momento actual una escasez del suministro de este fármaco debido a la alta demanda, por lo que el consumo por parte de personas que realmente no lo necesitan provoca que no haya para aquellos pacientes que realmente si lo necesitan.

Adictos a los ultraprocesados y después un fármaco para acabar con los efectos de estos ultraprocesados

La industria farmacéutica trabaja contrarreloj para invadir el mercado de este tipo de fármacos, primero nos hicieron adictos a los alimentos ultraprocesados y ricos en calorías insanas, creando una sociedad obesa y con exceso de peso, esto genera ganancias de miles de millones a las empresas alimentarias, ahora se prepara la adicción a este tipo de fármacos para mantenernos delgados, lo que generará otras ganancias de miles de millones a las empresas farmacéuticas, ya imaginaréis que son lo mismo. Nos crean el problema y nos resuelven el problema, todo cómodamente desde el sofá de nuestra casa, así que no tenemos de que preocuparnos, todo está controlado y las ganancias millonarias de las industrias alimenticias y farmacéuticas también.

Siendo el Ozempic un fármaco con un precio muy alto, nos encontramos que para estar delgado recurriendo a él,  tienes que tener dinero para poderlo pagar, con lo que estamos reafirmando que la obesidad y el sobrepeso es una cuestión de clases sociales. Las personas que puedan costeárselo podrán estar delgadas sin el más mínimo esfuerzo.

La mayor parte de las personas que lo utilizan sin necesitarlo nunca te confesarán que lo hacen, ya que su uso se identifica con una falta de fuerza de voluntad y pereza a la hora de cambiar los hábitos de vida y optar por una alimentación saludable acompañada del ejercicio requerido en cada caso. Pero el hecho es que se está utilizando indiscriminadamente.

Podríamos pararnos a reflexionar qué clase de sociedad estamos creando, la pérdida de valores, la pérdida de la cultura del esfuerzo, la poca tolerancia a la frustración.

Aprender a comer sano, nuestro mejor recurso para no necesitar medicamentos de adelgazamiento

Ozempic para quien verdaderamente lo necesite y siempre bajo prescripción médica. Los demás optemos por un cambio de pensamientos respecto a nuestra alimentación, como describo en mi último libro “La alimentación emocional”, donde vas a conocer una nueva forma de comer, desde el respeto y el amor a ti mismo, desde un cambio de pensamientos y sentimientos, y así un cambio de acciones y actitud, todo ello mantenido en el tiempo para crear nuevos hábitos, nuevas costumbres y así nuevos circuitos neuronales que informen a nuestro centro regulador del peso que se encuentra en el hipotálamo en nuestro cerebro, que esta nueva forma de comer es la mejor y la más saludable y que entienda que nunca nada le va a faltar, porque esto es muy importante, nunca nada le va a faltar.

Dra. Marisa Navarro.