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La cibercondría, también conocida como hipocondría digital, es un fenómeno cada vez más común en nuestra sociedad hiperconectada. Se refiere a la tendencia de buscar síntomas médicos en internet y llegar a conclusiones alarmantes sobre la propia salud. Este comportamiento puede llevar a un ciclo de ansiedad y preocupación excesiva o incluso a desarrollar síntomas descritos en las búsquedas realizadas.
La cibercondría es un trastorno caracterizado por la búsqueda compulsiva de información médica en internet, que a menudo provoca una preocupación excesiva e irracional sobre la propia salud. A diferencia de la hipocondría tradicional, que implica una preocupación constante por la salud basada en síntomas físicos reales o imaginados, la cibercondría se ve exacerbada por el acceso ilimitado a información médica en línea.
Las causas de la cibercondría son diversas y están estrechamente relacionadas con el uso de la tecnología y el acceso a la información. Entre las principales causas se encuentran:
Los síntomas de la cibercondría pueden variar en intensidad y manifestarse de diferentes maneras, por ejemplo:
La Cibercondria se puede superar, algunas estrategias efectivas para manejar y reducir este comportamiento serían:
Establecer límites claros sobre cuándo y cómo buscar información médica en internet es crucial. Utilizar solo fuentes confiables y aprobadas por profesionales de la salud puede reducir la ansiedad asociada con la cibercondría. ¿Pero como sabemos que son fuentes fiables? Lo aconsejable en NO consultar información médica sin ser un profesional de la medicina.
En lugar de depender de internet para diagnósticos, es esencial consultar a médicos y otros profesionales de la salud para obtener información y asesoramiento preciso. La confianza en los expertos puede aliviar la necesidad de buscar en línea.
La ansiedad es un factor clave en la cibercondría. Practicar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o la respiración profunda puede ayudar a reducir los niveles de estrés y ansiedad.
Desarrollar siempre un enfoque crítico hacia la información encontrada en internet es vital. Aprender a evaluar la credibilidad de las fuentes y reconocer que no todos los síntomas indican una enfermedad grave puede reducir el miedo. Aunque lo adecuado es dejar de consultar síntomas de enfermedades en internet.
Si la cibercondría está interfiriendo significativamente en la vida diaria de la persona, buscar la ayuda de un psicoterapeuta puede ser muy beneficioso. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es especialmente efectiva para tratar la ansiedad y los comportamientos compulsivos asociados con la cibercondría.
La cibercondría, o hipocondría digital, es un desafío creciente en nuestra era digital, donde la información médica está al alcance de un clic. Sin embargo, con conciencia y las estrategias adecuadas, es posible superar este comportamiento y reducir la ansiedad relacionada con la salud que puede generar. Limitar la búsqueda de información médica en internet, o mejor no buscar ninguna, confiar en los profesionales de la salud y practicar técnicas de relajación, son pasos cruciales hacia una vida más equilibrada y libre de preocupaciones excesivas sobre la salud. En muchas ocasiones afectan más estas preocupaciones que los propios síntomas de la enfermedad.
Abordar la cibercondría con empatía y comprensión puede transformar esta experiencia en una oportunidad para desarrollar una relación más saludable con la tecnología y la información médica. Si sientes que la cibercondría está afectando tu vida, recuerda que hay recursos y profesionales disponibles para ayudarte a encontrar el equilibrio y la tranquilidad que necesitas.
He escrito cuatro libros de autoayuda, cualquiera de ellos puede ayudarte a superar este problema junto a los síntomas de ansiedad y angustia que puede provocar.
Dra. Marisa Navarro.