«El insulto» es una película dramática, en la que un pequeño altercado entre un libanés cristiano y un refugiado palestino y musulmán, da lugar a un enfrentamiento entre dos grupos, en el que el odio y los resentimientos hacen que la disputa, así como el rechazo y la intolerancia, adquieran cada vez mayores proporciones, de modo que un incidente que podía haber quedado en una simple anécdota, toma una extraordinaria dimensión.
Pero lo cierto, es que las cosas son más bien lo que interpretamos o nos decimos acerca de las mismas, y nadie puede ofender a otra persona sin su consentimiento, pues la gente hace cosas, y tú decides si te afectan o no, ya que la actitud interior es la que determina las emociones que sentimos.